PSORIASIS
ENFOQUE GENERAL DESDE LA NATUROPATÍA
-Psicosomática y autoinmune.
Psoriasis es una enfermedad dermatológica inflamatoria que tiene su origen en un trastorno del sistema inmune, por lo que es considerada como una enfermedad autoinmune, el ataque del sistema inmunitario al propio organismo.
Es además una de las llamadas psicosomáticas, la ansiedad, compulsividad, irritabilidad, miedo son determinantes, esto quiere decir que tras la tendencia alopática errónea de la separación absoluta del cuerpo por aparatos de la mente se impone el enfoque traído desde la antigüedad por Hipócrates en que el humano es un ser indivisible entre cuerpo, mente, espíritu, que es el que hoy todavía comparte la naturopatía, por lo que este aspecto tienen mucho que ver en este padecimiento.
Factores como alteraciones del sistema inmune, infecciones, cambios hormonales, inadecuada gestión del estrés, sedentarismo, toxicidad medicamentosa o el exceso o falta de luz solar son factores que pueden alterar el estado de la enfermedad o ser precursores de un primer brote que marcará este padecimiento de una manera crónica.
-Tipos de psoriasis.
Por su localización anatómica, o descripción patológica de la lesión existen diferentes tipos de psoriasis.
Artritis psoriásica, eritrodérmica o pustulosa las menos frecuentes y de peor pronóstico.
Psoriasis en placas, en forma de gotas, en cuero cabelludo en pliegues de flexión, palmas o plantas, ungueal, facial, son las más frecuentes.
-Enfoque de la Naturopatía.
La línea general va a venir marcada por una máxima: la curación de estos procesos viene de dentro hacia afuera, por lo que no se conciben los tratamientos por vía tópica como eficaces, más que para el alivio sintomático del prurito, descamación, eccema, supuración, grietas… y otras molestias propias de la enfermedad, si son abordadas con cortico-esteroides por vía tópica, suelen rebrotar las lesiones con más virulencia y agresividad.
-Regulación fisiológica de las vías de eliminación que principalmente en estos casos pasan por ayudar a depurar al hígado y el intestino grueso, con fitoterapia, tinturas, extractos o aceites esenciales apropiados si es preciso, y según cada caso, pero son de uso frecuente el cardo mariano, boldo, bardana, alcachofa, salvia, caléndula, centella asiática, orégano, cúrcuma…
-Nutrición, intentamos que la persona identifique posibles intolerancias por leves que parezcan o alergias más reactivas; lactosa, huevo, gluten, algunos frutos secos como cacahuete, u otros alérgenos que pueden contener la fresa o el kiwi, evitar mariscos, carnes rojas, bebidas alcohólicas o gaseosas y excitantes como el café y algunos tés.
-Una dieta antinflamatoria que evite productos excesivamente ácidos o picantes a base de verduras, hortalizas frescas cocinadas al vapor o en ensaladas, comer lo más limpio y sano posible alejados de preparados industriales y productos refinados. Aprovechar los antioxidantes que ofrece la temporada a través de las frutas, verduras, hongos, hortalizas, tubérculos, hojas, semillas, algas, legumbre, bebidas vegetales. Productos como el aloe tiene utilidad tanto por vía interna como por vía externa para las lesiones y el proceso depurativo de los intestinos, son de importancia los prebióticos
El sistema inmunitario tiene una alteración donde se auto-agrede y es muy complicado revertir esta alteración, sabemos que el modulador del ciclo de brotes aun siendo multifactorial son muy importantes los aspectos emocionales y psicosomáticos.
Emilio Vega
Vocal de APENB en Madrid. (Asociación Profesional Española de Naturopatía y Bioterapia).